sábado, 25 de octubre de 2008

FOTOGRAFIANDO EL TIEMPO

...¿Por que no conocía eso de mi misma? Quizás porque nunca me miré fijo a un espejo durante 9 minutos, y si lo hubiera hecho, más allá de verme al revés, el tiempo, esos minutos, jamás me hubieran ayudado a observar mis propias transformaciones.

Los sutiles cambios de los gestos se dan tan lentos, que percibirlos en tiempo real sería pretender ver cómo una flor va abriendo sus pétalos...